El “ficto” resultado de imaginar –de inventar- un ente ficción, una metáfora, un símbolo matemático, un personaje literario, etc, en el que concentra y expresa una parte mayor o menor de su experiencia del mundo y de sí mismo...

Así como ejemplos de fictos son D. Quijote y Sancho Panza, creados por su genial autor como expresión de su experiencia de la vida humana, de su trato con los hombres. Así pues el número de fictos es ilimitado, tantos como metáforas.
Sin embargo, qué ocurre cuando el ficto es uno mismo?. Qué pasa cuando alguien crea para sí mismo un simulacro?.
La respuesta de Zapatero a la madre de la niña Irene Villa, causa un enorme estupor a todos por ser un Presidente de gobierno quién lo dice.
La respuesta dada por el Presidente de España a una mujer que sufrió en sus carnes un brutal atentado, superviviente de él, ella y su hija, es propio de un niñato de instituto que anda tomando pastillas y alcohol los fines de semana y el resto de la semana camina a clase con pantalones de rapero, pelo rafta y kefiah al cuello, y como no, con la fotito del ché en la carpeta de los apuntitos... Pues bien, ayer Zapatero alcanzó el misterio de la eterna juventud, habló con una superviviente de un atentado y en su “mismidad” más absoluta lanzó y mi abuelo también murió, (por ser asesinado) así como el que cuenta una gran epopeya sufrida en la familia y que el niño tiene como tema de morbo con los coleguis de “insti...”

Nada de su frase revela algo de conmiseración, ni siquiera hubo gesto de empatía, sacó su yo, su “mismidad”, su “Yo sé quien Soy”, su “Me-Mi”. “Ser para sí”. Algunos podrán objetar a esto que es la nota más esencial de la condición humana, pero eso es propio de las etapas del desarrollo humano, alcanzada la madurez, el Ser, se muestra Supremo cuando no piensa en su mismidad particular sino en las “Mismidad Humana” reflejo de la primacía antropológica de la reflexividad hegeliana o como la capacidad de conocerse a sí mismo de Descartes, nada de eso ocurrió en hombre que está en la más alta institución del país. A Zapatero lo único que lo caracteriza es una caricatura de sí mismo, un invento de sí mismo, Zapatero ficto de Zapatero, he aquí el gran misterio de algunos que en extrañas circunstancias alcanzan el poder.
Señoras y señores, la Historia ya nos ha demostrado tozudamente “miles” de veces, que cuando un “ficto” llega al poder, hay previamente una decadencia y una debacle de los valores morales y, en consecuencia las consecuencias pueden ser devastadoras, nunca han terminado bien...
Zapatero ayer creó un simulacro de joven pija a la occidental, un ser soberbio que no necesita a nadie, que no tiene nada que dar ni nada que recibir, pero que “alcanza” el grado de la “verdad absoluta” y esto no es nada más que el preludio de una tragedia previamente anunciada y la caída desde el precipicio.
Así, después del reto que ETA ha lanzado al jefe del ejecutivo de España, Zapatero ya nos anuncia la posible respuesta a los asesinos.

Zapatero y su “mismidad” sólo ante el peligro, cae ya precipitadamente hacia las garras de la misma Bestia que está alimentando desde su sillón. Al menos podría haber mentido a esa mujer con un poco de estilo, ni eso!.
Ninguna falta hacía decir lo que le has dicho a esa pobre mujer tan doliente y sin restañar aún las heridas, pero Zapatero no puede ser otra cosa que su “ficto”.

Y mientras ETA... Te espera en tu “mismidad”!